El Pino en Femenino IV
12 de marzo
Analizamos las cifras de la violencia de género: España es pionera a nivel legislativo en este asunto pero, todavía hay muchos retos pendientes.
La última charla-coloquio de nuestro ciclo El Pino en Femenino es a cargo de Blanca Hernández Oliver, letrada de las Cortes Generales y Ex Delegada del Gobierno para la violencia de género. Su ponencia, "La violencia contra las mujeres y las niñas: reflexiones y retos pendientes", nos recordó la importancia de días como el 25 de noviembre -día internacional para la eliminación de la violencia contra la mujer- y el 8 de marzo -el día internacional de la mujer.
La realidad de la violencia sobre las mujeres en números es espeluznante. Los números no mienten y las cifras son muy elevadas, tanto en el ámbito de la violencia de género en la pareja, la mutilación genital femenina, la trata con fines de explotación sexual, la violencia sexual, los matrimonios forzados, los crímenes de honor, violencia contra las mujeres en los conflictos bélicos... Hay otras formas de violencia contra las mujeres como las estirilizaciones forzosas, pero quizás la muestra más evidente de que esta violencia se ensaña con el sexo femenino es que se estima que hay 117 millones de niñas no nacidas como consecuencia de las políticas del hijo único.
Una vez presentado y analizado el problema, pasamos a la respuesta, las herramientas, ideas y acciones en el mundo y en España. Y por supuesto, una de ellas es el Feminismo que ha sido el movimiento intelectual y activista encargado de denunciar la desigualdad y la discriminación y de conseguir la igualdad entre hombres y mujeres, desde la Revolución Francesa hasta nuestros días, con distintas oleadas que tenían distintas autoras “de cabecera” y tenían reivindicaciones concretas: derechos, sufragio, trabajo, derechos sexuales, fin de la violencia…
Por otro lado tenemos también los Organismos Internacionales y, en este aspecto, España se convierte en un referente internacional por sus actuaciones: los movimientos de asociaciones de mujeres, en el año 1997 el caso Orantes, la ley de 2003 y 2004 hasta nuestros días o el pacto contra la violencia de género.
Tenemos un modelo en España pionero, con luces y sombras. Destaca muy positivamente que es un tema del que se habla, hay un compromiso unánime, se dispone de datos, se tiene un sistema completo de protección y existe una sociedad concienciada. Pero por otro lado, debemos todavía mejorar en muchos aspectos: todavía siguen existiendo muchas formas más sutiles de violencia contra las mujeres, hay mucho silencio y normalización de muchos aspectos, se debe trabajar mucho más con la juventud y los grupos más vulnerables, se debe formar a los profesionales, incidir en las nuevas cuestiones que están apareciendo como los vientres de alquiler o confusión en los discursos.
Todos y todas formamos parte de esta lucha, debemos abrir los ojos, proteger a los más pequeños y educarlos, debemos tener una actitud unánime, tomar compromiso cada uno desde su posición y debemos hacerlo por todas las mujeres y las niñas de todo el mundo.